CORTE, CAMBIO Y SENTIMIENTOS

Nuevo corte de pelo

Hoy quiero contarte sobre mi aventura en busca de una nueva peluquería. Después de una búsqueda exhaustiva por nuestra zona, finalmente encontré una por San Patricio, el barrio vecino. No fui a la peluquería de siempre, principalmente por una cuestión económica y porque esta vez solo quería hacerme un corte simple. Nada de tinturas ni de cosas raras en mi pelo por un tiempo.

Decidí arriesgarme y opté por un corte bastante agresivo, con un degradado al cero. Mi hermano seguramente lo llamaría un corte futbolista, pero la verdad es que él siempre ha preferido cortes más clásicos, mientras que yo siempre me he animado a experimentar un poco más con mi cabello. Me gusta probar cosas nuevas y ver qué tal me quedan.

Después de salir de la peluquería, volví a casa bajo una intensa lluvia. Me mojé hasta los huesos, pero no me importó demasiado. Me encanta la sensación de la lluvia cayendo sobre mi piel y el olor a tierra mojada en el aire. Me recordó a esos días de infancia en los que solíamos jugar bajo la lluvia sin preocupaciones.

Una vez en casa, me puse a desayunar tardíamente. Mientras disfrutaba de mi comida, estuve hablando un rato por WhatsApp con mi amigo Sebas. Es genial tener a alguien con quien compartir momentos y conversaciones, aunque sea a través de la pantalla.

En medio de nuestra conversación, mi mamá llegó de su viaje.

En fin, hoy fue un día lleno de cambios. Me animé a probar un nuevo corte de pelo y enfrenté la lluvia sin preocuparme demasiado por mojarme. Tuve una agradable charla con Sebas, quien siempre da una luz de esperanza. Y luego, el regreso de mi mamá, que me hizo reflexionar sobre nuestras complejas emociones.

Gracias por blog por dejarme expresarme libremente. Siempre es bueno tener un lugar donde puedo ser yo mismo sin temor a ser juzgado.